Las cicatrices son simplemente marcas de heridas
mal curadas, o simplemente obviadas.
Cuando el dolor es tan intenso, tiendes a
enmascararlo y evadirlo
Meterlo en una caja fuerte, y empujar hacia
dentro
Cuando los ojos escuecen tanto de aguantar las
lágrimas demasiado tiempo, porque simplemente te niegas a dejarlas caer, porque
si empiezas a sacarlo, sabes que nunca vas a parar.
El sentir que alguien muy preciado te es
arrebatado, es tan sumamente doloroso, que ni siquiera se puede describir.
Es como si te arrancaran una parte de ti, otra
vez. La historia se repite, e intentas aparentar normalidad, pero dentro, sabes
que no va a durar mucho esa aparentemente verdadera normalidad, esas sonrisas
falsas, esas risas vacías.
Sientes tal vacío que lo único que crees sentir
es el frío y el calor que ya ahora no sabes cómo sentir.
El sentimiento de saber que no vas a aguantar
tanto con la máscara puesta pone la piel de gallina, porque sabes que cuando
menos te lo esperes, ahí va estar, el sentimiento que tanto repeles, el dolor.
Pensar en lo que no va a poder ver, en lo que se
va a perder, en lo que tú te vas a perder, es demasiado, es como si te vaciaran
por dentro, y te dejaran solamente con tu máscara, pero una máscara sola, no
sirve para nada si lo que debe estar detrás desaparece, si simplemente se
evapora.
Un sentimiento, una pérdida, es una herida que
nunca, nunca se va a curar, simplemente va a quedar una cicatriz
Esa cicatriz va a determinar lo que eres, cómo
eres y quien eres
Esa cicatriz te va a mostrar la fortaleza que ni
tú sabías que poseías.